Glee no tuvo el "exito" que esperabamos en Tv azteca (Nota)

Nota Por Álvaro Cueva

El estreno de la semana va a ser la segunda temporada de “Glee” que se va a presentar mañana a las 22:00 horas por Fox.

Se lo aviso con tiempo para que lo apunte y no se lo vaya a perder ya que “Glee” es una de las mejores series del mundo, uno de los conceptos más exitosos de los últimos tiempos.

Si no ha funcionado en Azteca 7 es porque la programan ya cuando todo el mundo se la sabe de memoria, porque la anuncian a una hora y la sacan a otra, porque la cambian de horario y porque la refunden en la medianoche, cuando su mercado natural está en el quinto sueño.

Pero “Glee” es “Glee”, una maravilla de los mismos responsables de conceptos tan polémicos como “Nip/Tuck” que narra las aventuras de un montón de personajes vinculados al coro de una escuela entre secundaria y preparatoria de Estados Unidos.

Están los alumnos, pero también los maestros, los padres de familia, los amigos y los enemigos de otras instituciones.

¿Por qué es tan exitosa si, honestamente, cuando uno la platica suena como a sucursal barata de “High School Musical”?

Por varios motivos. El primero, porque sus protagonistas no son chavos perfectos hiper-buenones que vivan las grandes aventuras paranormales del siglo XXI.

Son menos que gente común y corriente, son “perdedores”, hombres y mujeres que no tienen ni la belleza, ni el dinero, ni las capacidades físicas, ni la vida sexual, ni el color de la piel, ni la figura, ni el estereotipo heterosexual para triunfar en la vida.



Sin embargo, son personas que le echan ganas a lo que hacen y que a través de la búsqueda de un objetivo en común encuentran el amor propio y aprenden que, en efecto, la felicidad está más allá de lo que nos han enseñado.

Cualquiera puede brillar, y si los personajes de “Glee” brillan, el público que los mira todavía más.

Por eso somos muchos los millones de hombres y mujeres que los amamos y que nos aprendemos sus canciones y coreografías. Nos identificamos con ellos, y en sus sueños reconocemos nuestras propias ilusiones.

Además, es una serie muy alegre, como un inmenso cuento de hadas plagado de rolas que todos ubicamos perfectamente bien colocadas para crear un efecto dramático sobre este híbrido entre melodrama seriado, comedia romántica y película de superación personal.

Yo tengo una devoción muy especial por esta serie porque en estos tiempos en que todo es posible en la televisión gracias a la libertad de expresión y al manejo de efectos especiales, “Glee” nos remite a los orígenes del espectáculo:
A la música, a la risa, al baile, al llanto, a las intrigas, al romance, a los enredos, a la pasión.

¿Quién no ha reído con alguna escena de esta producción estadunidense? ¿Quién no ha suspirado en alguno de sus capítulos? ¿Quién no ha descargado alguna de sus canciones? (Yo tengo una de alarma en mi celular).

Bueno pues si la primera temporada de “Glee” le gustó, yo creo que, a pesar de que las expectativas son muy altas y de que por ahí anda mucha gente que se ha dejado guiar por los comentarios del mercado norteamericano, este segundo paquete de capítulos le va a encantar.

A diferencia de otras emisiones que arrancan su nueva temporada justo en el punto en que se quedó la anterior, “Glee (2)” inicia en un asunto completamente diferente.
Ahora el mundo está en crisis, hay problemas de presupuesto, los protagonistas están muy “quemados” y tienen que luchar por integrar a más gente al equipo y por demostrar que pueden cantar algo más que canciones rosas de los años 80.

Por supuesto, hay nuevos personajes juveniles. ¿Pero qué cree?
También hay nuevos personajes maduros y uno de ellos pinta para ser la revelación del momento: una entrenadora mega-tremenda que va a ser la peor enemiga de la que ya era la super-villana de la serie: Sue Sylvester (Jane Lynch).

El intercambio de fuerzas que se produce entre estas dos mujeres es de no creerse de tan chistoso y de tan efectivo, y ni hablemos de los problemas a los que se van a enfrentar los muchachos.

Son espectaculares porque, sin olvidar los conflictos que venían arrastrando desde la temporada uno, ahora van a tener más pretextos para sufrir y más retos para superar.
Desde rupturas amorosas inesperadas hasta el temor a la competencia pasando por cirugías de senos, la llegada de un nuevo chico a la escuela y más, mucho más.

Por si esto no fuera suficiente como para que usted reserve la noche de mañana para gozar con la experiencia “Glee”, Fox ha preparado una sorpresa: el preestreno del capítulo de la nueva temporada de “Los Simpson” dedicado a esta serie con sus personajes, sus canciones y muy buenos chistes.

Acépteme un consejo y abónese a Fox mañana desde las 21:30 horas. Se la va a pasar muy bien y se va a poner al día con una de las series de televisión más queridas del mundo: “Glee”. ¡Que comience la función!

Pero “Glee” es “Glee”, | una maravilla

Fuente: Milenio.com
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odio ser la portadora de esta mala noticia (no se desquiten con mi rep)
la verdad yo no culpo a la televisora pero nunca fui entusiasta de glee en TV abierta ya que ponen los capitulos cuando quieren y eso NO ES BUENO!!!
seria mejor si tuvieran mas control con los horarios